El modelo del “Doble diamante” es un marco de Diseño ideado por el Consejo Británico en 2005 y sucesivamente actualizado en el 2015, que ofrece una metodología aplicable tanto por diseñadores como no diseñadores, con el objetivo de procesar información obtenida mediante la investigación y encontrar soluciones a problemas complejos que respondan a las necesidades de las personas implicadas en un determinado servicio.

¿Cómo se hace?

El proceso de implementación de esta metodología queda representado por dos diamantes que simbolizan un proceso de exploración de un tema de forma amplia y profunda, recopilando mucha información (pensamiento divergente), para luego tomar una acción focalizada (pensamiento convergente). 
 

1. La primera fase es el Descubrimiento, que permite comprender cuál es el problema. Esto implica llevar a cabo técnicas de exploración e investigación como grupos focales o entrevistas, que permitan una conversación directa con las personas implicadas, con el objetivo de obtener información de la forma más directa posible. En esta fase es fundamental:
   • Mantener una mente abierta, de modo que el apego a una hipótesis no perjudique la etapa de recolección de datos.
   • Fomentar una reflexión orientada al usuario, en sus necesidades y sus formas de actuar e interactuar
2. La segunda fase es la Definición consiste en definir el objetivo, meta o reto a partir de la información obtenida en la fase de descubrimiento. Es muy probable que el resultado de la primera sea una gran cantidad de información que será necesario estudiar y organizar en profundidad para poder aplicarla de manera efectiva. Es en esta fase que toda la información y datos obtenidos se organizan para generar una definición más específicas y correcta del conjunto de problemas que necesitan solución. En esta fase de detectarán:
   • Los problemas a solucionar y las necesidades a satisfacer.
   • El contexto y el alcance general del proyecto.
   • Oportunidades e ideas a tener en consideración para el planteamiento de soluciones.
   • Ineficiencias o el uso inadecuado de recursos, sean estos materiales o persona.
3. La tercera fase es el Desarrollo forma parte del segundo diamante. En esta fase se trata de concretar respuestas a aquellas preguntas detectadas en las fases anteriores y avanzar soluciones a los problemas definidos mediante la implementación de técnicas creativas, o equipos de co-creación que permitan trabajar bajo el marco del consenso de todos los interesados.
4. La cuarta y última fase es la Entrega, que implica probar las soluciones a pequeña escala, rechazando las ideas que no funcionen y mejorando las que sí.

Principios de diseño

Los cuatro principios básicos a adoptar durante la elaboración de las soluciones a los problemas detectados, para trabajar de la manera más eficaz posible, son los siguientes:

1. Poner a las personas en primer lugar y comenzar el proceso de investigación tratando de entender a las personas  a la hora de utilizar un servicio, sus necesidades, fortalezas y aspiraciones.
2. Comunica de una manera visual e inclusiva facilitando la definición y compartición de un consenso acerca del problema y de sus posibles soluciones.
3. Colabora y co-crea: trabaja en equipo e inspírate de lo que otros hacen.
4. Itera, itera, itera: Haz esto para detectar errores, evitar riesgos y construir confianza en tus ideas. 

Crea una cultura del éxito

Los problemas a los que nos enfrentamos hoy requieren más de una idea, requieren trabajar con otras organizaciones y apoyar a las personas para que sean parte de la solución. Tan importante es el proceso y los principios que adoptamos como la cultura de la organización y cómo ésta se conecta con ciudadanos y socios:

• Se necesita liderazgo para fomentar la innovación, desarrollar habilidades y capacidades, proporcionar permiso para la experimentación y el aprendizaje.
• Se necesita el compromiso con las personas que entregan las ideas y las reciben, pero también con otros socios que podrían tener otras ideas.